25 Abr, 2025

¿Para qué sirve la saliva? 6 funciones básicas y su importancia en la salud bucodental

¿Cuáles son las funciones de la saliva?

La saliva es uno de los componentes más infravalorados en nuestra salud oral, a pesar de desempeñar un papel crucial en el equilibrio y funcionamiento de la cavidad bucal. Producida principalmente por las glándulas salivales, esta sustancia compuesta mayoritariamente por agua (alrededor del 99%) cumple funciones esenciales que van mucho más allá de simplemente “humedecer” la boca.

Las funciones básicas de la saliva

En este artículo de Dental Navarro, analizamos las 6 funciones básicas de la saliva, así como algunas de las patologías más frecuentes relacionadas con su alteración, como la xerostomía (boca seca), la sialorrea (exceso de salivación) o las enfermedades que pueden transmitirse por medio de la saliva.

1. Lubricación y protección de tejidos

La saliva recubre los tejidos blandos de la boca, como las encías, la lengua y las paredes internas de las mejillas, protegiéndolos frente a agresiones físicas, químicas y térmicas. Esta lubricación facilita además el habla y los movimientos bucales, reduciendo la fricción entre superficies.

2. Inicia la digestión

La saliva contiene enzimas como la amilasa salival (ptialina), que comienza el proceso de digestión de los carbohidratos incluso antes de que los alimentos lleguen al estómago. Gracias a esta enzima, los azúcares complejos empiezan a descomponerse desde la boca.

3. Mantiene el equilibrio del pH bucal

Actúa como un regulador del pH oral, ayudando a neutralizar los ácidos producidos por bacterias tras la ingesta de alimentos. Esto es vital para prevenir la desmineralización del esmalte dental y, por tanto, la aparición de caries.

4. Facilita la cicatrización

La saliva contiene proteínas como la histatina, que tienen propiedades antibacterianas y cicatrizantes. Estas contribuyen a una recuperación más rápida frente a heridas, úlceras o irritaciones orales.

5. Controla la flora bacteriana

Gracias a su contenido en inmunoglobulinas, lisozima y otras proteínas antimicrobianas, la saliva ayuda a controlar el crecimiento de bacterias patógenas, manteniendo el equilibrio de la microbiota oral y reduciendo el riesgo de infecciones.

6. Permite el gusto y la deglución

La saliva disuelve los compuestos químicos de los alimentos, facilitando que las papilas gustativas los detecten. Además, forma el bolo alimenticio y ayuda en la deglución, asegurando un paso cómodo y seguro hacia el esófago.

Trastornos relacionados con la saliva

El desequilibrio en la producción o composición de la saliva puede derivar en diversas patologías. A continuación, repasamos las más comunes:

Xerostomía o boca seca

La xerostomía se produce cuando las glándulas salivales no generan suficiente saliva. Esta condición puede deberse a múltiples causas, como tratamientos con radioterapia, fármacos (antidepresivos, antihipertensivos, antihistamínicos), enfermedades autoinmunes (como el síndrome de Sjögren) o el simple envejecimiento.

Síntomas frecuentes:

  • Sensación de boca pegajosa o seca.
  • Dificultad al hablar, masticar o tragar.
  • Mayor propensión a caries y halitosis.
  • Infecciones bucales recurrentes (como candidiasis).

Sialorrea o hipersalivación

En el otro extremo se encuentra la sialorrea, una producción excesiva de saliva que puede estar causada por problemas neurológicos (como el Parkinson), alteraciones del sistema nervioso autónomo, reflujo gastroesofágico o como efecto secundario de ciertos medicamentos.

Aunque puede parecer un problema menor, la sialorrea puede causar incomodidad social, dermatitis perioral y complicaciones en la masticación y el habla.

Enfermedades transmisibles por saliva

La saliva puede ser vehículo de transmisión de múltiples enfermedades, aunque su función protectora y bactericida limita la supervivencia de muchos patógenos. Aun así, existen virus que se transmiten por el contacto con la saliva, como:

  • Virus de Epstein-Barr (causante de la mononucleosis).
  • Citomegalovirus.
  • Virus de la hepatitis B.
  • Herpes simple (HSV-1).
  • SARS-CoV-2 (COVID-19).

Por eso, compartir utensilios, bebidas o besos con personas infectadas puede conllevar riesgos, especialmente en casos de sistemas inmunitarios comprometidos.

Alteraciones del sabor (disgeusia)

Aunque no siempre se relaciona directamente con la saliva, la disgeusia puede surgir cuando hay una alteración en la cantidad o composición salival, afectando a la percepción de los sabores. Esto puede estar relacionado con infecciones, fármacos, déficit nutricionales o trastornos sistémicos.

¿Qué hacer ante una alteración de la saliva?

Si notas cambios en la cantidad de saliva, sabor en la boca, sequedad persistente o aumento descontrolado de la salivación, es importante acudir al dentista para una evaluación completa. En Dental Navarro realizamos diagnósticos individualizados y te ayudamos a encontrar la causa subyacente, ofreciendo soluciones adaptadas a cada caso.

Conclusión de Dental Navarro sobre la saliva

La saliva es mucho más que un simple fluido oral: es una aliada indispensable para la salud bucodental y general. Conocer sus funciones y estar atentos a cualquier alteración puede ayudarnos a prevenir complicaciones a largo plazo. Si tienes dudas o presentas alguno de los síntomas mencionados, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.

¿Tienes problemas con la saliva? Te esperamos en Clínica Dental Navarro. ¡PIDE CITA AHORA!

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